La palabra dicha
La palabra de Dios le deja saber a los cristianos que Dios es el único Dios que se comunica con y se revela a la humanidad. Y cada vez que leemos la Biblia siempre hay mucho más que aprender porque Dios se revela cada vez más según leemos. Dios habla a la humanidad a través de su palabra, la Biblia, la cual solamente la pueden entender con la ayuda del Espíritu Santo aquellos que tienen a Cristo como salvador. La palabra de Dios escrita en la Biblia tiene poder y en Hebreos 4:12 podemos ver algunas de las características de ese poder. Nos dice, “Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón” (RVR 1960).
Una de las características es que la palabra de Dios es viva porque ella habla a todo el cristiano que fielmente la lee. La palabra de Dios es como una carta de amor inspirada por el Espíritu de Dios, que sirve de guía al cristiano para vivir, honrar, conocer, obedecer, y servir a Dios. La palabra de Dios es eficaz porque es poderosa y cuando es leída y oída efectúa resultados que se pueden experimentar. La palabra de Dios penetra porque llega al alma y a lo más profundo de nuestro ser. La palabra de Dios discierne nuestros pensamientos y juzga los motivos de lo que ya hemos pensado y de lo que estamos pensando porque el Espíritu de Dios nos ayuda a descubrir las intenciones fabricadas en nuestros corazones.
A veces como esposas de pastor tenemos resentimientos y pasamos por cosas por las cuales no podemos hablar o discutir con alguien, y pensamos que tiene que haber otras maneras de aprender de la palabra de Dios para darnos fortaleza. Por ejemplo, yo aprendí que muchas esposas de pastores, especialmente las que son esposas de plantadores de iglesia, pasan todos los domingos sirviendo de una forma u otra durante el servicio los domingos y a nadie se les pueden quejar. Y por servir a Dios, lo cual es bueno, se pierden la palabra de Dios dicha, la prédica de su esposo todos los domingos. Este es un problema que he estado observando por muchos años según viajo hablando a las esposas de pastores al nivel nacional. Hermana, permítame animarla a buscar a alguien de confianza en su congregación, u ore para que Dios le envíe a otras personas que tomen su lugar los domingos durante el servicio, para que usted pueda también oír la palabra de Dios. El Señor si le puede hablar a usted durante su tiempo a solas con él, pero recuerde que las esposas de pastores también son ovejas y como ovejas necesitan el alimento espiritual que Dios traiga a través del pastor. No se sienta culpable si no puede servir a la iglesia todos los domingos. Dios es soberano y le ayudara a encontrar a alguien con quien usted por lo menos se pueda alternar todos los domingos.
Muchas de nosotras hacemos cosas diariamente sin fallar como comer, dormir, usar el teléfono, Facebook, etc., y por lo ocupada que vivimos no le dejamos tiempo a Dios porque estamos tan cansadas que nos dormimos con la Biblia en las manos. Tenemos el esposo (el pastor), los hijos, la iglesia, las amigas necesitadas, y también mantenemos un hogar. “En una ocasión escuche decir a un pastor: ‘No permitas que Satanás gane terreno espiritual en tu vida viviendo en aridez espiritual. Lee la palabra de Dios.’ He atesorado estas palabras por mucho tiempo, especialmente cuando habla de sequia espiritual porque eso es lo que sucede a nuestro espíritu cuando no nos alimentamos diariamente del pan de la palabra de Dios.” Como esposas de pastor, tiene que haber más compañerismo con Dios, leer y escuchar la palabra de Dios es una necesidad aun más grande porque después de oír y leer la palabra de Dios usualmente la usamos para animar y enseñar a otros.
Como humanas a veces se nos puede llenar el corazón de resentimiento por estar siempre trabando para la iglesia, para nuestras familias, etc., y estamos siempre sin parar como el conejito de las baterías “Energizer” el cual sigue y sigue y nunca para por las baterías tan buenas que lleva. ¡Recuerde que hasta a este conejito se le terminan las baterías! Si quieres hacer decisiones y quieres descansar en Dios, comienza o sigue leyendo la Biblia diariamente. La palabra de Dios, la Biblia, consuela, nutre el alma, sirve de aliento, y nos sirve de guía para el vivir diario. Escoge un lugar especial para leer, escoge una hora donde nadie te moleste (antes de que se despierten los hijos o después que se acuesten), escoge tu versión de la Biblia favorita, y pasa tiempo en oración pidiéndole a Dios que te guie a través del Espíritu Santo para que puedas entender todo lo que Dios quiere que aprendas y apliques ese día. Al principio de comenzar a leer la Biblia, tienes que ser intencional y pedirle al Dios soberano que te ayude a mantenerte firme.
La palabra se hará mas real para ti cuando después que la lees puedes compartirla con otras personas, la memorices, y medites en ella diariamente. Josué 1:8 nos dice, “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien” (RVR 1960). ¡En la vida de la esposa de un pastor siempre tiene que haber más! ¿Más qué? Más tiempo en la palabra de Dios. Siguiendo el versículo anterior no solamente se convertirá la palabra de Dios viva y eficaz en tu vida, pero también te penetrará el alma y te dará discernimiento a servir para la gloria de Dios.
Clara
Es esposa de Bruno Molina Asociado de evangelismo de la Convención de los Bautistas del Sur de Texas (SBTC); es madre de una hija y un hijo; Es autora de ¡Oh no! Mi esposo es el pastor, The Pastor’s Wife: Missionary to the World, y de su nuevo libro Legacy of Wisdom (programado para publicación en diciembre 2013); es escritora independiente de más de 30 artículos cristianos y tiene una maestría de educación cristiana (Master of Christian School Education) del seminario Southwestern Baptist Theological Seminary. La hermana Molina es conferencista, ha sido esposa de pastor, y viaja entrenando a las esposas de pastores a nivel internacional.
Thank you sister Clara. This is a great reminder to read His Word, to hear Him and to believe all that He has to tell us. It is for our own good. What a treasury of His promises to us!